Este alojamiento ofrece unas vistas espectaculares y un entorno natural precioso, tal y como lo mencionan algunos huéspedes en sus opiniones. Además, las instalaciones comunes, como la cocina y las zonas en común, están bien cuidadas y son acogedoras. Según los comentarios, la dueña es amable y se preocupa por los detalles, lo que brinda una sensación de bienestar.

fue una experiencia maravillosa. El entorno espectacular y las vistas al despertar son impagables. El pueblo también es precioso y la anfitriona es encantadora. Sin duda volveremos.

Apagaron las luces sin avisar.

Lugar magnífico, entorno espectacular, vistas preciosas, anfitriona encantadora.

No hay nada malo que decir.

Ambiente auténtico. Vistas impresionantes. Senderos cercanos. Atención amable.

No hay nada malo que decir.

Fue una estancia magnífica en un lugar hermoso con duenas hospitalarias. Increíble vista, mermeladas caseras, detalles hechos a mano. Un paraíso para descansar y relajarse rodeado de arte, flores y colores.

Me sentí seguro caminando por la noche, no tengo ninguna queja.

el ambiente del lugar era encantador y acogedor, con zonas comunes y actividades que te invitaban a relajarte y disfrutar. La habitación tenía vistas impresionantes, aunque le faltaba un armario. La posibilidad de cocinar y llevar comida resultó muy práctica. Además, la ubicación era ideal para explorar Bubión y Capileira a través de senderos.

faltaba espacio de estacionamiento, teníamos que aparcar cerca del pueblo.

Anfitriona amable, instalaciones completas, cocina equipada, ambiente relajado, vistas impresionantes.

Nada, todo bien.

Ideal para desconectar y disfrutar en familia, en pareja o solos. Emplazamiento privilegiado con vistas impresionantes. Personal atento y amable. Los desayunos deliciosos y caseros. Ambientes comunes acogedores y decorados con buen gusto.

El sitio es espectacular de día y de noche, ideal para descansar y desconectar. Cada rincón es chulísimo y Montse es una gran anfitriona, pendiente de todo. Las habitaciones son amplias y cómodas, con todo lo necesario. La cocina es preciosa y no le falta detalle. El trato es cercano y muy agradable. Las vistas son únicas y se pueden disfrutar las estrellas en la noche y el amanecer y atardecer. No hace frío en el interior.

Me sentí como si estuviera con mi familia, no me puedo quejar.

Tranquilidad, naturaleza, paz, sitio rústico, paisaje precioso.

Absolutamente nada.

Recientemente pasamos unos días maravillosos en Cortijo Casa Ibero, un alojamiento rural en la Alpujarra. La casa es hermosa y tiene un ambiente acogedor que te hace sentir como en casa. Montse, la dueña, nos trató de maravilla y fue muy amable en todo momento. Disfrutamos de las preciosas vistas a la montaña y a Capileira, así como de los espacios íntimos que ofrece el cortijo. Además, pudimos iniciar rutas de senderismo hacia el pueblo y el río desde allí. El desayuno fue fantástico, con deliciosas mermeladas y bizcochos caseros. Sin duda, una estancia increíblemente hermosa y especial. Recomendado al cien por cien para hacer turismo por la Alpujarra y descansar.

De verdad que lo aconsejo.

La limpieza del hotel es impecable. Las instalaciones son excelentes, especialmente la cocina compartida. El personal es amable y atento. La ubicación del hotel es perfecta, con vistas espectaculares.

Encantadora Montse, tranquilidad, bonito pueblo, buena ubicación, detalles acogedores, mascotas bienvenidas.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

Nos encantó la ubicación de este alojamiento, con vistas espectaculares y rodeado de naturaleza. La cabaña era acogedora y la terraza muy cómoda para disfrutar del paisaje. Además, las zonas comunes estaban muy bien decoradas y eran acogedoras, especialmente la piscina y la sala de estar. nos gustó la ruta cercana que nos llevó a Capileira.

El desayuno podría ofrecer más variedad de productos.

La ubicación es genial, con vistas impresionantes. Las instalaciones son acogedoras y bien decoradas. El personal es amable y atento. Todo fue perfecto.

Todo fue perfecto.